Al abrirla te encontrabas con las instrucciones del juego, las cuales decían entre otras cosas que aquél que la encuentre debe meter ilusión y dejarla en cualquier otro lugar para que otra persona la encuentre de nuevo.
Pasé unos veinte minutos leyendo todos los post-its que habían dentro, con frases desde "Sonríe, es gratis" y "No me puedo creer que esto exista de verdad..." hasta chistes estúpidos que también me sacaron media sonrisa.
El otro día, sonreí y me llené de ilusión, el otro día era un día triste y sonreí. El otro día, desconocidos me regalaron sus palabras sin pedir nada a cambio, sólo por el mero placer de provocar una sonrisa.
Ahora viene cuando tú coges una caja pequeña, le pegas una pegatina que ponga "Cápsula de Ilusión" y le das vida a este movimiento.
¿Hay algo que valga más que una sonrisa?
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